lunes, julio 4

Que todos los personajes vuelvan a su historia

Yo no entiendo, cual es el fin de gritar todo lo que siento si termina mal, mi subconsciente está enfermo tiene gripe y llora penas y enojos, sueña probabilidades que cuando despierto queda el eco de la amargura en mis labios, y las marcas de lágrimas que no lloré en la noche.
En mis sueños los lugares eran normales, las situaciones escalofriantes, era como si todo se volviera en mi contra viviendo mis peores miedos, sentirlos, hacerlos míos, es por eso que cuando pasan no me sorprendo, porque de alguna manera ya los he vivido, mi alma se hizo de esa forma, para antes de que pasen vivir todos los temores, o quizás mi mente está jugando un mal juego conmigo.
Es porque veo las cosas mas de tres veces antes de asimilarlas, y las veo con ojos distintos, y cuando llega el día de enfrentarme a ellos con ojos temerosos no hago más que mirar mis pies y bajar las orejas, sé que el final será el mismo que soñé esas noches donde el sueño no era lo mío. Es difícil toparse frente a frente con la realidad y que sea una ola de pesares y malos entendidos, y creer que mienten hasta los sonidos (como las palabras elocuentes que llegan a tus oídos con frecuencia tratando de creerlas y sabiendo que un día no serán más que cenizas de lo ocurrido, que tinta borrada en un papel viejo y marchito, que un pétalo aplastado por algún libro olvidado del estante. ¿Cuánto puede soportar un hombre normal la realidad? me obligan diariamente a dejar de soñar, desde el momento que me despiertan los ruidos envolventes y externos hasta que me acuesto agobiada por el día.
¿No es mejor seguir soñando?, quizás soñar los pesares para que los reales sean solo una mala copia de su ensueño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario