Yo detengo la luna, tú detienes el sol, pero más me gusta parar el mundo que hay dentro de vos. Como cuándo abres los ojos y me ves a mí revoloteando como palomita por tus senderos o cuándo extiendes tus brazos y lo que rodean es mi cintura y tus manos tocan mi cuerpo que parece ciudad en hambruna. Somos como un círculo sin principio ni fín, un círculo vicioso, dónde yo juego apostandolo todo, desde lo que tengo y lo que no, desde lo que he visto y lo que me imagino, apuesto todo lo que se ha cruzado en mi camino.
Soy enrealidad como como mariposas que están dentro de mi ''yo'', están dentro de mi estómago, nacen y mueren, como todas las cosas cumplen un ciclo, al final todas acaban en un mismo lugar, ninguna se despide de beso ni abrazo, a lo más hacen un frío ademán, una mueca con poca expresión... ellas vienen y van, vienen y van. También me agrada la sensación de correa más mi cuello, somos como perritos bus can do nos, todo está hecho de dos en dos, como los zapatitos de charol, como mi luna y tu sol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario